Repaso: ¿cómo cuidar sus ojos a diario?
28 000 parpadeos al día, 6 músculos oculomotores, 2 millones de colores percibidos: los ojos realizan unas proezas extraordinarias para que podamos escrutar plenamente nuestro entorno. Por tanto, ¡estos merecen toda nuestra atención!
Para proteger esta valiosa ventana abierta al mundo, procure aplicar estos consejos en la vida diaria:
- Practique sus actividades visuales (lectura, escritura, costura…) en un lugar suficientemente iluminado para limitar la fatiga visual (1).
- Haga pausas regulares si usted trabaja con una pantalla siguiendo la regla 20-7-20: cada 20 minutos, fije un objeto situado a 7 metros de usted durante 20 segundos (2).
- Descanse lo suficiente, contando como mínimo con 7 u 8 horas de sueño cada noche (3).
- Para las personas que se maquillan, desmaquille correctamente sus ojos cada noche para prevenir irritaciones.
- En el exterior, opte por gafas de sol adaptadas a la luminosidad ambiente: los cristales de categoría 4 constituyen la protección máxima (pero están prohibidos para la conducción).
- Lleve las gafas o las lentillas que le han prescrito para beneficiarse de un confort visual óptimo.
- Incluso si usted no tiene problemas de vista, hágase un examen oftalmológico cada 2 o 3 años para detectar precozmente eventuales patologías silenciosas (DMAE, catarata, glaucoma…)
Las mejores sustancias para la salud ocular
Vitamina A y retina
La vitamina A, que forma parte de las vitaminas liposolubles, juega un papel crucial en numerosas funciones biológicas. Esta contribuye entre otras cosas al metabolismo del hierro, al funcionamiento normal del sistema inmunitario y al mantenimiento de una piel normal (4-6).
No obstante, ¡es en la retina donde fue aislada por primera vez! A modo de repaso, esta membrana tapiza la pared interna profunda del globo ocular. Esta se encarga de convertir las señales luminosas en impulsos eléctricos transmitidos al sistema nervioso central, que a continuación las traduce a imágenes. Para conseguirlo, la retina está dotada de dos tipos de fotorreceptores: los bastones y los conos. Los bastones, que funcionan con una luminosidad baja, aseguran una visión monocromática en la oscuridad. En cuanto a los conos, estos son la causa de nuestra percepción de los colores cuando hay suficiente luz.
La vitamina A contribuye al mantenimiento de una visión normal al intervenir en la síntesis de la rodopsina (púrpura visual) (7). Al absorber la luz en los bastones, este pigmento rojo se encuentra de hecho ardientemente requerido en la adaptación a la obscuridad. Por otra parte, esta vitamina contribuye al mantenimiento de las “membranas mucosas”, entre las que se encuentra la conjuntiva que recubre la frágil córnea (8).
No sintetizada por el organismo, la vitamina A debe ser proporcionada por la alimentación, fundamentalmente de dos maneras: ya sea por un aporte directo de vitamina A preformada en los productos de origen animal (retinol) o bien por un consumo de vegetales ricos en carotenoides (beta-caroteno).
El arándano, la pequeña baya de la vista
¡Los beneficios del arándano (Vaccinium myrtillus) para el espejo del alma no son nuevos! Ya en la Edad Media, la curandera visionaria Hildegarda de Bingen veía en este un valioso aliado para la visión deficiente. Más adelante, esta baya azul negra adquiere una gran popularidad entre los pilotos de caza británicos durante la Segunda Guerra Mundial, que abusaban de estos paramantener la agudeza visual la vista durante los vuelos nocturnos.
Desde entonces, este fruto de la familia Ericaceae sigue fascinando a los investigadores, especialmente por su buen contenido de antocianos, pigmentos responsables de su color oscuro. De ello se desprende que el arándano contribuye a mantener la salud de los ojos y la función ocular a través de una acción antioxidante y un apoyo venoso (9-11).
Este contribuye entre otras cosas a la estabilización de la formación de colágeno en los ojos, sustancia clave en la cohesión y la protección del tejido ocular. Por otra parte, también contribuye a la salud de las venas y de los vasos capilares que irrigan especialmente el nervio óptico y el limbo corneal, asegurando así un aporte adecuado de oxígeno y de nutrientes.
¿Cuál es el mejor complemento para los ojos?
Usted lo ha comprendido: un buen complemento alimenticio para los ojos debe incorporar retinol y arándano en su formulación.
Una fórmula sinérgica ideal lo combinaría también con carotenoides (astaxantina, zeaxantina y luteína) y con otros compuestos prometedores (como los antocianósidos, las antocianinas, los polifenoles o la quercetina) (12).
Esta es precisamente la intención con el complemento OptiVision que cuenta en total con 15 compuestos excepcionales, que dan preferencia a los ingredientes naturales: por tanto, retinol y extracto de arándano, pero también carotenoides, glutatión, extracto de pepita de uva, de tagete o clavelón de la India, bayas de Schizandra...
Unos complementos extra para una visión superior
En paralelo, hay otras sustancias que le pueden ayudarle a arreglar sus ojos.
Muy presente en la retina, el DHA contribuye al mantenimiento de una visión normal (13-14). Por tanto, una suplementación con este omega 3 particular puede ser adecuada (por ejemplo, con Super DHA, fórmula ecorresponsable a base de DHA y de EPA procedentes de pesca sostenible).
Otro recurso de la naturaleza que no hay que pasar por alto: la corteza de pino marítimo (Pinus pinaster) que contribuye a mantener la salud del ojo, al actuar más específicamente sobre su vascularización (15). Así que, para beneficiarse de esta, usted puede optar por complementos dedicados al confort visual que la contengan (como Eye Pressure Control, fórmula enriquecida con arándanos y vitamina E).
Tanto para los ojos como para el resto del organismo, siempre es bueno luchar contra los procesos de oxidación que aceleran el envejecimiento celular, especialmente mediante una alimentación antioxidante rica en frutas y verduras coloridas (16). ¿Desea usted reforzar sus aportes? Opte por una suplementación ultracompleta (como AntiOxidant Synergy, una potente formulación que incorpora cúrcuma, pepita de uva o resveratrol).