4 beneficios del zinc específicos para la mujer

El zinc: un oligoelemento indispensable para nuestra salud

El zinc es un mineral esencial que interviene en más de 300 reacciones enzimáticas.

Contribuye particularmente a la síntesis normal del ADN, al funcionamiento normal del sistema inmunitario y al mantenimiento de unos huesos normales.

Recientemente se ha estudiado por sus posibles beneficios para las mujeres, especialmente las embarazadas, así como por sus efectos sobre la menopausia, el cabello, las uñas y la piel.

Ingesta diaria recomendada de zinc

• Mujeres adultas: 8 mg/día (1).
• Hombres: 11 mg/día.
• Mujeres embarazadas: una media de 11 mg/día.
• Mujeres en periódo de lactancia: 12 mg/día

Riesgos de deficiencia de zinc y síntomas asociados

Los síntomas frecuentes de la falta de zinc pueden incluir fatiga, dificultad en cicatrizar, caída del cabello, uñas quebradizas, disminución de la inmunidad y trastornos en la producción de sebo, lo que puede favorecer el acné.

Ciertos momentos en la vida de una mujer son más probables de generar una deficiencia de zinc:

• El embarazo y la lactancia, ya que genera un aumento de las necesidades (que debe supervisar un médico).
• La menopausia, durante la cual las propiedades antioxidantes del zinc desempeñan un papel protector.
• La adopción de dietas vegetarianas, veganas o ricas en fitatos (presentes en los cereales integrales, las lentejas, las legumbres y el germen de trigo), que disminuyen la absorción del zinc.

4 beneficios reconocidos del zinc para la mujer

1. El zinc y las hormonas en la mujer: regulación hormonal y fertilidad

El zinc podría contribuir a la fertilidad y a la reproducción. Desempeña un papel clave en la maduración de los ovocitos y en la regulación hormonal, ya que participa en los procesos enzimáticos necesarios para la síntesis hormonal.

Esta función no es solo teórica; el descubrimiento del «zinc spark» (chispa de zinc), un fenómeno en el que se libera zinc durante la fecundación, ilustra su posible implicación en el proceso de concepción.

Un estudio reciente ha demostrado que, entre varios metales estudiados, el zinc está asociado positivamente con las posibilidades de concepción, mientras que otros metales como el cobre, el cobalto o el cromo pueden tener efectos adversos sobre la fertilidad.

Hay estudios que indican que el zinc podría proteger la fertilidad femenina al reducir el impacto negativo de ciertos metales tóxicos (2).

2. El zinc y el embarazo: desarrollo fetal e inmunidad materna

El zinc interviene en el proceso de división celular y contribuye a la síntesis normal del ADN, esencial para el desarrollo fetal.

También favorece el funcionamiento normal del sistema inmunitario, ya que participa en la activación de ciertas enzimas y células inmunitarias, lo que puede reducir el riesgo de infecciones en las mujeres embarazadas.

Un metaanálisis mostró que la suplementación con zinc podría reducir ligeramente el riesgo de parto prematuro (3).

3. Zinc u menopausia: protección ósea y propiedades antioxidantes

Con la edad, las mujeres están expuestas a una pérdida de densidad ósea. El zinc, en sinergia con la vitamina D, participa en el mantenimiento de una estructura ósea normal y contribuye a proteger las células contra el estrés oxidativo.

Participa en la formación y regulación de las células responsables de la renovación ósea (osteoblastos y osteoclastos).

Un estudio reciente demostró que, en las mujeres posmenopáusicas con baja densidad ósea, la ingesta alimentaria y los niveles séricos de zinc, calcio y magnesio eran significativamente inferiores a las recomendaciones (4).

Los investigadores subrayan que estas carencias minerales pueden desempeñar un papel clave en la fragilidad ósea y recomiendan una suplementación específica con zinc, calcio y magnesio, posiblemente combinada con cobre, para favorecer la salud ósea.

Así, mantener un aporte suficiente de zinc podría contribuir a la protección ósea y a la preservación de la densidad mineral, como complemento de un estilo de vida saludable.

4. Zinc y belleza: piel, cabello y uñas

El zinc contribuye al mantenimiento del cabello, la piel y las uñas en condiciones normales.

Estos efectos se explican por el papel del zinc en la síntesis de proteínas y la división celular, necesarias para la regeneración de las células.

De hecho, un estudio destacó que la piel, rica en zinc, depende de este mineral para su buen funcionamiento y que las deficiencias o disfunciones de los transportadores de zinc pueden provocar trastornos cutáneos, caída del cabello y ralentizar la cicatrización (5).

Esto explica la frecuente presencia de zinc en algunos cosméticos y complementos alimenticios de belleza.

Descubra el complemento Daily Beauty, rico en zinc, vitamina B8, colágeno y queratina.

La queratina, proteína esencial para el cabello y las uñas, contribuye a su solidez y crecimiento, complementando así la acción del zinc.

Descubra el complemento Hair & Nails Formula, que contiene zinc y tiene un alto contenido en queratina solubilizada y patentada (Cynatine® HNS).

¿Cómo cubrir las necesidades de zinc?

Alimentos ricos en zinc

Algunos alimentos son especialmente interesantes para obtener un aporte suficiente de zinc:

• Ostras: hasta 74 mg/100 g, un récord en cantidades de zinc natural.
• Carne (ternera, pollo).
• Mariscos (cangrejo, langosta).
• Cereales integrales (pan de centeno y de trigo).
• Legumbres (lentejas, alubias blancas).
• Verduras frescas (espinacas, brécol).
• Frutas ricas en zinc (anacardos, almendras, semillas de calabaza).

Especialmente relevante para los vegetarianos, los fitatos presentes en las legumbres y los cereales integrales pueden reducir la absorción del zinc (6). Para remediarlo, se recomienda remojar o germinar estos alimentos antes de cocinarlos; un gesto sencillo que aumenta la biodisponibilidad del mineral.

Complementos alimenticios de zinc

Los complementos alimenticios de zinc pueden ayudar a cubrir las necesidades diarias, especialmente en caso de deficiencia o de necesidades aumentadas (embarazo, menopausia, estrés oxidativo).

Según la forma utilizada, la biodisponibilidad y los efectos específicos pueden variar.

• Orotato de zinc: en esta forma, el zinc es combinado con el orotato, un compuesto que podría facilitar su paso al organismo. El orotato de zinc es conocido por su alta biodisponibilidad, lo que puede contribuir a cubrir eficazmente las necesidades de zinc.

Descubra el complemento Zinc Orotate, para obtener el zinc en su forma más biodisponible.

• Zinc L-carnosina: combinación de zinc y L-carnosina, este dipéptido podría reforzar la mucosa digestiva y contribuir al bienestar intestinal, mientras participa en la protección de las células del intestino.

Descubra el complemento Zinc L-Carnosine, una combinación natural de L-carnosina y zinc.

• Bisglicinato de zinc: en esta forma, el zinc se une a dos moléculas de glicina, lo que hace que sea leve para el estómago y relativamente fácil de asimilar. Puede ser adecuado para quienes buscan un aporte regular y fácil de tolerar.

Descubra el complemento Advanced Zinc Bisglycinate Lozenges, apreciado por su óptima biodisponibilidad y su tolerancia.

• L-OptiZinc®: esta forma patentada combina el zinc con un aminoácido y podría ofrecer una mejor tolerancia digestiva y una alta biodisponibilidad. Es adecuada para un aporte diario regular.

Descubra el complemento L-OptiZinc®, que contiene tanto zinc como L-metionina, un aminoácido esencial muy bien asimilado.